Conceptos esotéricos : Los elementales.

En este artículo nos vamos a concentrar en la idea de los elementales como sinónimo de seres que pertenecen a los elementos, agua, aire, fuego y tierra.

No vamos a ocuparnos de los llamados elementales que son creados por los magos de manera consciente tal cual nos lo detalla Bardon en sus libros, para la realización de determinadas tareas que les son encomendadas.

Nuestro cosmos conocido está formado por los cuatro elementos detallados anteriormente y que emanaron del principio Akasha. Estos cuatro elementos con sus correspondientes asociaciones crean todo aquello que conocemos. No debemos entender a los elementos solamente como su contraparte material, el elemento agua no es solamente el agua que bebemos sino que es todo un entramado de dinámicas y energías que en relación con los demás elementos tienen la capacidad de configurar nuestro mundo.

Según el conocimiento esotérico los elementales son previos a la existencia de la vida animal o vegetal en la tierra tal cual la conocemos y ayudaron a la creación y mantenimiento de la misma, así como lo siguen haciendo aun hoy.

Dentro de cada uno de estos elementos viven, por así decirlo, seres que no se expresan normalmente dentro de nuestro mundo material. Esto no implica que en algunos momentos y por razones no del todo comprendidas algunas veces estos seres pueden hacerse notar en nuestro entorno material.

Ondinas, gnomos, elfos, hadas, espíritus guardianes de muchos tipos (tales como el Ángel de la Guarda), sílfides, espíritus del lugar, de los bosques, de determinados árboles (como hemos visto en otros artículos de este blog) y muchas otras denominaciones dependiendo de las culturas que consideremos, han estado siempre presentes en las narraciones que se cuentan a los niños y que se transmiten como leyendas de generación en generación. 

Este tipo de seres tienen una existencia continua y permanente en todas las culturas a lo largo del planeta, culturas que no se conocían ni tenían una relación generaban sus propias entidades con diferentes nombres pero con características y circunstancias muy similares.

Los elementales tienen su morada en el plano energético, pero en la zona limítrofe, en los cuales los estados vibratorios intermedios se encuentran la energía visible y la materia visible, se da la posibilidad que se hagan perceptibles para los humanos, o mejor dicho para algunos humanos.

Estos espíritus de la Naturaleza son difíciles de ver, pero, como le ha pasado a la mayoría de quienes hemos estados solos en un bosque, por poner un ejemplo, los percibimos como una presencia que sigue nuestros devaneos por el lugar y nos hace sentir observados.

Al estar en un plano superior al nuestro, en donde la vibración es más rápida, ellos pueden hacerse visibles de quererlo, a través de hacer que su vibración se vuelva más lenta, muchas veces se perciben luces o simples destellos o solamente percibimos lo que su presencia aporta al medio, que puede ser un mover de hojas un sonido o algo parecido.

Aunque en este artículo vamos a hacer un repaso de los principales seres elementales divididos por su elemento de referencia, hay que aclarar que la variedad de seres elementales, de espíritus de la Naturaleza es mucho más amplio, existiendo muchos seres con sus características distintivas, más o menos parecidos a los seres humanos, con vidas mucho más cortas o más largas, con mayor o menor consciencia de si, que tienen su existencia tanto como nosotros la nuestra.

No es lógico comparar a los seres elementales con el ser humano pero se lo hace como manera de hacerlo más comprensible.

La principal función de estos espíritus de la naturaleza es la de conservar la vida natural, la de las plantas, la de los animales y si también la del hombre en algunos casos, aunque la vida de los entornos no naturales como la de las ciudades, los espanta. Los seres elementales pueden vivir de manera solitaria o en comunidades, y, así como entre los humanos no todos los de un mismo tipo son iguales, hay espacio para sus personalidades y sus diferentes aptitudes.

Existen muchos tipos de seres elementales, pero aquí vamos a agrupar los más comunes en nuestra tradición occidental, según el elemento que habitan.

Elementales de la tierra: gnomos, enanos y hadas.

En el elemento tierra son clásicos los gnomos, hadas y enanos. Según algunos autores los gnomos pueden presentar diferentes apariencias y diferentes tamaños, desde apariencias de monstruos o de animales extraños o similares a humanos, así como pueden ser de diferentes tamaños, desde pequeños de pocos centímetros a seres de varios metros. Los enanos en cambio son, como lo implica de alguna manera su nombre, de pequeña estatura, dicen que unos 10 o 20 centímetros seria su apariencia más normal y no variarían su apariencia que seria similar a la de un humano con la cabeza levemente más grande en proporción al cuerpo. De los enanos se dice que gustan de estar en contacto con los humanos, bastante más que otros elementales, y pueden comportarse de manera traviesa, generalmente escondiendo cosas, o inclusive ayudando a algunos con determinadas actividades principalmente a los magos y a aquellos que pueden entrar en contacto con ellos.

Tanto gnomos como enanos suelen aparecer con apariencia asimilable a la masculina, mientras que las hadas se les asocia con seres femeninos, aunque la visión de las hadas no es tan dulcificada como aparecen en los cuentos de niños. Hay hadas de variados tamaños, desde muy pequeñas hasta de la estatura de un ser humano. Estos seres son grandes conocedoras de los secretos de la herboristería y comparten con gnomos y enanos el conocimiento sobre la tierra y sus tesoros en la forma de piedras preciosas, metales valiosos o simplemente tesoros enterrados. Gustan las hadas de la compañía de los niños y ejercen muchas veces de sus protectoras aunque no son muy amigas de los humanos adultos.

Los elementales de la tierra tienen la capacidad de moverse entre los materiales sólidos, rocas, paredes, tierra, o lo que sea, sin ningún problema atravesándolos sin dificultad.

Elementales del agua: sirenas, ondinas, nereidas y ninfas.

A manera de resumen se pueden diferenciar a las sirenas, que habitan las aguas saladas de los océanos y mares de cuerpo superior de mujer y parte inferior de pez, las ondinas y las ninfas que habitan las primeras los ríos y las segundas las fuentes y manantiales. Las nereidas por otra parte habitan la espuma de los mares así como grutas sumergidas.

Las sirenas son asociadas al elemento agua y, de alguna manera también al aire, ya que pueden vivir fuera del mar, momentos que utilizan para cantar, y de esa manera atraer a aquellos que surcando los mares no tomen las precauciones necesarias y caigan en su seducción.

Las nereidas tienen el cuerpo superior de mujer y el inferior de serpiente marina, y son reconocidas por escoltar a la esposa de Poseidón, Anfitrite así como escoltar a Afrodita. Se las asocia como la contraparte femenina de los Tritones.

Las ondinas habitan los ríos, principalmente aquellos con oquedades, cascadas y rocas que generan espuma. Se las representa como mujeres seductoras y se las representa habitualmente como mujeres que se acicalan con peines que pasan por sus largas cabelleras. Al igual que las sirenas pueden encantar a los hombres que pasan por su cercanía.

Las ninfas son seres elementales protectoras de las fuentes y manantiales. En su corporeidad no se diferencian de una mujer humana en nada, son siempre muy bellas y enigmáticas. Pueden ser tanto positivas como negativas para los humanos ya que son muy caprichosas. Su apariencia es de una eterna juventud.

Los elementales del aire: Silfos y Elfos.

Los elementales del aire son los más difíciles de ser vistos tanto porque rehuyen a los humanos como por sus rápidos movimientos.

Los elfos son seres pequeños y antropomorfos, en continuo movimiento, que viven exclusivamente en el aire, yendo de flor en flor eligiendo aquellas que poseen perfumes agradables y colores brillantes. Son seres benéficos y no tienen nada que ver con los elfos que han popularizado algunas series de televisión actualmente que son seres cuasi humanos.

Los silfos solo tienen apariencia humana en la cabeza mientras el resto del cuerpo es difícilmente perceptible debido a la rapidez de sus movimientos, se los asocia en algunos casos con seres angélicos, con alas en continuo movimiento.

Los elementales del fuego: las salamandras.

Estos enigmáticos seres viven en el fuego y pueden tener una gran variedad de tamaños desde unos pocos centímetros hasta el tamaño de un relámpago en el cielo. Su apariencia se asocia a la de un ser con forma de serpiente de color oscuro. Son los seres elementales más peligrosos para el ser humano que no esté preparado

Conceptos esotéricos : Bailes Rituales, Mantras y Mudras

Conceptos esotéricos : Bailes Rituales, Mantras y Mudras

Hoy veremos tres conceptos relacionados con la actividad mágica y que sirven para elevar el poder y de esa manera lograr aquello que buscamos, sea esto un mayor bienestar, la práctica de la magia u otras metas.

Estas tres prácticas inciden a través de los cambios vibratorios y los estados alterados que proporcionan a ayudar a lograr nuestros objetivos si se saben encausar.

El baile ritual

Estamos acostumbrados, hoy en día, a entender al baile como una manera de entretenimiento, de socializar con otros y en los casos más excelsos de manifestación artística. El baile ha sido de alguna manera despojado de significación y de objetivo.

En el pasado y, aun hoy para algunos pueblos y grupos, el baile era mucho más que eso. El baile era una manera de conectar con otras dimensiones, era una manera de agradar a los dioses, de conseguir que los dioses intervinieran en sus problemas del día a día, como podía ser conseguir mayor fertilidad, hacer llover o vencer a los enemigos.

La danza de movimientos repetitivos, muchas veces circulares (como las de los derviches por ejemplo) y aunadas a músicas con una base rítmica potente y repetidas de manera continua provocan que los danzarines entren en estados de consciencia alterados. Son ejemplo de esto las danzas rituales africanas, por ejemplo, que con la base rítmica de los tambores son parte importante de los ritos afroamericanos, el umbanda o el quimbanda.

La danza, entendiendo como la misma los movimientos realizados en un ritual, de manera repetida en el tiempo y acompañada de diferentes movimientos, músicas, cantos y demás, está presente en todas las actividades rituales. El desplazarse de un sacerdote católico mientras oficia la misa, con los movimientos que se han repetido durante siglos (elevar la hostia en la consagración por ejemplo) es un ejemplo de ello.

La base y el poder del ritual, y los movimientos que forman parte del mismo (la danza o movimientos asociados), son tomados de su repetición. A mayor repetición en el tiempo más fortalecerán la ceremonia o rito asociado así como mayor serán sus efectos.

En la magia ceremonial, los movimientos y danzas, están pensados al detalle, los oficiantes no se desplazan por el templo de cualquier manera, sino que todo está prefijado y cada movimiento está cargado de significación.

El oficiante o mago busca mediante la danza el liberarse de inhibiciones, el trascender a su propia persona y conectar con otras dimensiones de la realidad y con los entes (dioses, espíritus, demonios o seres elementales, por citar algunos) con los cuales quiere contactar con un fin predeterminado. Los giros o movimientos, los ritmos y la repetición hace que la persona que dance y, muchas veces quienes los observan, entren en una especie de vértigo que facilita los estados alterados que se buscan.

Los Mantras.

Los mantras de manera sencilla son frases o cadenas de sonidos, con o sin significado, que se repiten con el fin de conseguir determinados objetivos.

Normalmente se asocia los mantras a la tradición de oriente principalmente a la de la India, pero los mantras están presentes en numerosas practicas alrededor del mundo, por citar alguno, las repeticiones que se realizan durante la misa católica pueden ser considerados mantras, ya que son repeticiones de palabras que se supone crean un resultado.

Existen mantras para casi todas las necesidades si nos atenemos a lo que se ve por Internet, pero lo básico de los mantras no es la de conseguir cosas a través de su repetición sino el de poder acceder , como en el caso de los bailes y movimientos rituales o ceremoniales, a un estado alterado de consciencia. Una vez en estos estados alterados podremos a través de la capacidad creadora de la palabra y su vibración, intervenir en nuestra realidad.

El poder del sonido de los mantras tiene un paralelismo con el uso de la música, presente en casi todos los rituales, religiosos o no que existen, el poder de la música es indudable a la hora de proporcionarnos estados mentales aunque el proceso pueda seguir siendo un misterio aun por descubrir. La conexión entre la música y la matemáticas potencia su actividad creativa aunque esto ya se nos va del tema del artículo.

Dentro de los mantras más famosos encontramos el “Om mani padme hum” o el mantra Hare Krisna “hare krisna, hare krisna, / krisná krisná, hare hare /hare rama, hare rama / rama rama, hare hare”.

Los mantras son esenciales para la magia por la capacidad creativa que implica la palabra. No olvidemos que en el principio fue el Verbo. El poder del sonido repetido induce esa conexión con nuestro yo superior y de allí con la divinidad en nosotros mismos.

Según la magia si nosotros conocemos el nombre de algo podemos tener dominio sobre el eso, es el reconocimiento del poder del nombre, de la palabra y del sonido lo que nos empodera. Si conocemos el nombre de un ser, esto automáticamente debería proporcionarnos su obediencia, según la magia de la evocación. El nombre de algo nos lo trae inmediatamente a la mente, es mucho más ingobernable aquello de lo cual no conocemos el nombre.

Esta idea esta presente en la práctica de la repetición de los mantras y su efectividad.

Los Mudras.

Los mudras son una serie de movimientos realizados con las manos a los cuales se les adjudica significación y poder. Quien no sepa algo de mudras no podrá entender porque algunas de las estatuas de Buda, por poner un ejemplo, van variando las posiciones de las manos. Cada posición tiene un significado que es entendido por quien tiene la clave para descifrarlo y, además de la capacidad de transmitir un mensaje tiene la capacidad de atraer a lo que de alguna manera nombra.

Los mudras también se pueden ver en numerosas danzas en las cuales los movimientos de las manos de los danzarines van contando una serie de conceptos que refuerzan el significado de la danza, el canto y la música. Lo vemos en las danzas antiguas de la India y de numerosos países de oriente.

En occidente los mudras también están presentes en el cristianismo por ejemplo los gestos que presentan las manos de las estatuas, de las imágenes pintadas nos van contando cosas. De manera más viva, en el ritual de la misa las manos van realizando movimientos, unir palma con palma sobre el pecho, el hacer la señal de la cruz y muchos otros.

A nivel cotidiano existen muchos mudras que utilizamos sin pensar demasiado en ello, el hacer “una peineta”, el levantar el dedo pulgar mientras arrollamos el resto para decir que estamos bien o de acuerdo con algo, o el cerrar los dedos de una mano salvo el meñique y el indice para contrarrestar algo malo (o indicar que nos gusta el Heavy Metal) son solo algunos ejemplos. Estos gestos son parte de una cultura que nos heredaron nuestros antepasados y poco pensamos en su significación.

A nivel mágico los mudras se utilizan como una serie de gestos que nos permite, recordar y traer a nuestro subconsciente, el poder de un ritual determinado, es de alguna manera un atajo para no tener que hacer un ritual entero en un momento que no es posible. La repetición del mudra será lo que hará el lazo entre los objetivos buscados y el movimiento de las manos.

Conceptos esotéricos: La Kundalini

 ¿ Qué es la kundalini?

La kundalini es la energía vital del ser humano.

Esta energía se encuentra, en la mayoría de los casos, dormida en la base de la columna y se la representa como una serpiente arrollada que está en reposo. Según los yoguis esta energía debe ser despertada y se la debe de ir elevando desde esta posición inicial y pasando por todos los chakras, llegar hasta el chakra de la coronilla, consiguiendo de esta manera la iluminación.

Esta es una definición absolutamente resumida de un proceso que puede llevarnos toda la vida o más bien varias vidas para poder completar. Y eso si hacemos todo como es debido.

Esta energía recorre el cuerpo por canales previamente determinados, estos canales no forman parte del cuerpo material, sino que son caminos que no se pueden ver ni tocar en el cuerpo pero que si se puede comprobar su realidad a través de la activación de los mismos mediante diferentes técnicas.

El Sushmana sería el canal principal por el que transita la kundalini, está en la zona central asociado a la médula espinal. Flanqueando a ambos lados existen otros dos nadis denominados Ida (a la izquierda) y Pingala (a la derecha).

Más allá de estos “caminos principales” existen 72.000 nadis que distribuyen esta energía partiendo del ombligo y llevándola a todas partes del cuerpo.

El concepto de kundalini, aunque tome diferentes nombres, no está solamente presente en oriente y asociado a la práctica del yoga, sino que aparece en la mayoría del conocimiento más o menos esotérico alrededor del mundo.

En muchas partes se promueve el despertar de esta energía, aunque el despertarla porque si, sin una preparación adecuada puede traernos algunos problemas con diferentes grados de intensidad. Hay que tener en cuenta que el ascenso de esta energía nos va a cambiar tanto a nivel corporal como espiritual como energético. Es recomendable pues, tener muy claro el manejo adecuado de esta energía y saber que puede producirnos, para que no nos tome por sorpresa los cambios y el proceso que se va a realizar.

¿Qué efectos trae su despertar?

El despertar de la kundalini y su ascenso va a traer una serie de cambios, a veces inesperados. Hay que tener siempre en cuenta que estamos manejando la energía más importante y no se la puede manipular a ciegas.

Es recomendable seguir las indicaciones de un buen instructor de yoga kundalini si nos proponemos comenzar de alguna manera a trabajar con esta energía de manera positiva.

De todas maneras la kundalini puede comenzar su ascenso aunque no hagamos yoga, otras actividades como la meditación provocan un ascenso importante y muchas veces, quien medita no toma en cuenta los cambios que puede sufrir. También se da el caso de personas que sufren este proceso sin hacer nada para favorecerlo. Solamente les sucede como parte de su evolución.

Lo recomendable es no forzar el ascenso de la kundalini de manera apresurada. Cuanto más lento y gradual mejor será la experiencia, ya que nos dará tiempo a que el cuerpo físico se vaya preparando así como nuestra psiquis. A pesar de que esto se lo va a decir cualquier instructor serio, la gente quiere generalmente apresurar el proceso, demostrando por esta misma impaciencia el no estar preparados para ello.

Mientras que un ascenso gradual y en una persona preparada puede ser una experiencia luminosa y totalmente transformadora a nivel positivo, los despertares repentinos, involuntarios o muy apresurados pueden traer síntomas tales como:

Emociones nuevas repentinas y generalmente desproporcionadas. Lloramos por nada, nos encontramos hipersensibles y cosas que nunca nos afectaron comienzan a verse como terribles, o por el contrario nos encontramos riendo sin motivo aparente.

Nerviosismo. No nos encontramos en calma en ninguna parte. Nada nos conforma. Esto puede ir acompañado de síntomas físicos como arritmias o taquicardias, contracturas musculares o estrés generalizado u opresión en el pecho.

Cambios bruscos en la temperatura corporal sin motivos aparentes. Escalofríos o sofocos.

Cambios en las pautas de comida. Tanto el de perder el apetito como el de comer sin tener un limite, lo que lleva a cambios en el peso corporal. Ganas de vomitar, sensación de estar lleno siempre. Diarreas, estreñimiento.

Experiencias auditivas extrañas. Pitidos, zumbidos, en casos extremos cuando se despiertan algunas capacidades psíquicas debido al mayor flujo de energía, se pueden oír voces o música de manera inexplicable.

Tenemos picos de energía y momentos de desgano total. Nos podemos sentir llenos de energía y ser capaces de aumentar nuestro desempeño en todos los aspectos como también podemos sentirnos incapaces de levantarnos de la cama. Muchas veces las dos situaciones de manera alterna.

Sensaciones nuevas, sentirnos raros o en algunos casos pensar que estamos perdiendo la cabeza. A veces los cambios son tan radicales que nos sentimos que no somos los mismos, lo que hace que pensemos que estamos enloqueciendo.

Mayor sensibilidad. Oímos los ruidos como aumentados , los olores son más intensos por poner algún ejemplo.

Cambios en los patrones de sueño. No dormimos casi o pasamos todo el día con sueño a pesar de haber dormido lo suficiente. Sueños más vividos y realistas.

Patrones de sexualidad nuevos. Se puede acentuar la necesidad sexual o puede desaparecer.

Estos son los síntomas más comunes de un despertar de la kundalini desordenado, involuntario o demasiado rápido. Existen una multitud de otros síntomas que pueden padecerse.

Pero no todo es negativo ni mucho menos.

El despertar de la kundalini, es un proceso necesario para la iluminación, todo por lo que podamos pasar, vale la pena si se piensa en el objetivo final. De todas maneras lo mejor es trabajar bien y dejar que las cosas lleven el tiempo que se necesita, que lo hagamos de manera consciente y ordenada para minimizar los efectos secundarios desagradables que pueden surgir.

Generalmente las personas pasamos por alguno de estos síntomas, pero una vez que estos se terminan vemos la vida de una manera totalmente diferente, se impone una paz y una felicidad profunda más allá de lo que podemos imaginar anteriormente. El premio final vale la pena,

La evocación mágica.

La evocación mágica.

Hoy voy a encarar el tema de la magia de evocación o sea la magia que nos permite convocar a seres de otras dimensiones para contactar con ellos y conseguir nuestros objetivos con la colaboración de ellos.

Personalmente es una de las ramas de la magia que más oscuras me parece, de la cual tengo mucho respeto al punto de que no he intentado nunca contactar con seres mediante este tipo de ceremonias. Lo que me impulsa a escribir este articulo, a diferencia de otros temas sobre los cuales tengo experiencia directa, son los continuos pedidos que me han realizado al respecto.

¿Cómo se realiza una evocación?

Los grimorios son los libros que atesoran el rito, más o menos detallado de como realizar esta operación mágica que traer a nuestra presencia los seres, dominarlos y conseguir que los mismos trabajen para lograr nuestros objetivos. Los grimorios más conocidos pueden ser el Heptamerón, el Picatrix, Las Clavículas, los libros de Abramelín, el libro de San Cipriano y muchos otros.

Dependiendo del grimorio el rito puede tener sus variaciones aunque a grandes rasgos, el rito de la evocación de seres se compone de las siguientes partes, la preparación del mago y de los instrumentos mágicos, (en donde destaca la confección del circulo mágico que servirá de protección contra estos seres y del cual ya escribí otro articulo), el llamado del ser, la aparición del mismo y la imposición del mago sobre este, el mandato que el ser debe cumplir para el mago y la despedida. Esto es a grandes rasgos y la manera de realizar cada una de estas fases, como vimos, dependerá de el grimorio que tomemos como base.

La “ceremonia” que rodea el rito, las vestimentas, las armas, generalmente una espada y un pentáculo (aunque se pueden utilizar otras), el altar, el lugar en que se lleva adelante el rito, las luces (generalmente velas) y el incienso son todos elementos que ayudan al oficiante a entrar en un estado alterado que propicia la aparición del ser convocado.

Con respecto a esta aparición no hay consenso entre los diferentes autores, mientras para algunos los seres se manifiestan indirectamente a través de efectos físicos (movimiento de cosas, ruidos, etc.) para otros es necesaria una materialización del ser o lo que es lo mismo que este se pueda visualizar sin ningún lugar a dudas. Para otros autores la evocación puede ser exitosa si se sienten determinados efectos a nivel psicológico solamente, o si se logra lo que se pidió, aunque no se haya hecho presente el ser de ninguna de las anteriores maneras.

Los dos grandes grupos de magos, entonces serían los que buscan una aparición objetiva del ser y los que lo entienden como algo subjetivo.

Para convocar a un ente en particular debemos tener en cuenta determinados detalles propios del ser y del tiempo de la evocación.

En el ejemplo del Heptamerón, para convocar un ser se debe conocer el sigilo del ser (sigilo aquí como dibujo o firma identificativa del ser no como los sigilos que hemos visto en otro de los artículos), los seres correspondientes a la estación del año, las horas, el día en que se va a realizar la llamada, la región y la estrella o planeta al que pertenecen los seres convocados. Todos estos seres deben ser inscritos en el circulo mágico con otros grafismos como estrellas de cinco puntas, nombres de ángeles y jerarquías, diversos nombres de dios etc. para el logro del éxito y la protección del mago durante la evocación.

Aparte de tener pronto el circulo y todos los implementos el mago debe seguir determinadas rutinas los días antes de realizar la evocación, tales como ayunos, evitar relaciones sexuales y otras conductas que deben ser observadas.

Asimismo, y según siempre el método del Heptamerón, todo lo que va a utilizarse deberá ser purificado con agua bendita. En el momento mismo del rito deben de recitarse los conjuros pertinentes al momento y al ser convocado. Para la visualización del ser es de principal importancia el uso de los inciensos adecuados para que a partir de los mismos el ser pueda hacerse visible.

Una vez presente el ser debe ser llevado a la obediencia del mago. No podemos convocar seres si no estamos preparados adecuadamente para los fenómenos que se van a producir, la muestra de debilidad o de miedo por parte del mago puede ser catastrófico para el rito y para el mago.

Lo que se vaya a pedir a estos seres convocados debe ser claro y no dejar ningún resquicio para que pueda ser mal entendido, ya que estos seres que han sido obligados a obedecer no lo harán de buena gana así que mucha precaución.

Se debe despedir al ser convocado y esperar a que todos los fenómenos se calmen antes de salir del circulo de protección, esto es muy importante y debe ser respetado a rajatabla.

¿Qué seres podemos traer o materializar mediante una evocación?

Los seres que más habitualmente se dice se pueden convocar son los demonios o ángeles caídos. La mayoría de los grimorios trata sobre el proceso de “traer” o materializar a estos seres.

Algunos autores como Bardon agregan otros tipos de seres como plausibles de ser convocados. Entre ellos destacan seres propios de los cuatro elementos y las inteligencias planetarias. Cada uno de estos entes tienen una cierta “jurisdicción” por decirlo de alguna manera sobre determinados temas, algunas inteligencias nos pueden asistir en temas de dinero, otras de amor, de negocios, de salud, y así en muchos temas. Cuando convocamos tenemos que tener claro que cosa queremos conseguir mediante la intervención de estos seres y buscar el que más se adapte al tema buscado.

La reflexión final de este tema es que hay que andar con mucha precaución en el tema de la evocación, no es solo conseguir un grimorio y seguir sus indicaciones ya que los riesgos son bastante altos, en mi caso personal todavía no me siento lo suficientemente preparada para realizar estos ritos. En caso de que algo salga mal en estas prácticas podemos correr riesgos tanto psicológicos como físicos. Mucha precaución.

Conceptos esotéricos: Los pensamientos son cosas.

Conceptos esotéricos: Los pensamientos son cosas.

El titulo no es figurado, como se verá a continuación, es una afirmación literal.

El concepto que se maneja sobre los pensamientos a nivel esotérico difiere del concepto popular que se tiene de los mismos. La principal y más importante diferencia es el tratamiento de lo que genera un pensamiento por el solo hecho de ser pensado.

A nivel popular no se tiene mucho en cuenta las repercusiones de un pensamiento, si este no provocó ninguna acción, ya se asume que no tiene consecuencias. Se entiende que no importa lo que pensemos, que es algo sin repercusiones.

A nivel esotérico los pensamientos son tratados de otra manera.

Existen una serie de diferencias importantes las cuales vamos a detallar:

El pensamiento es una realidad creada por nosotros que se vuelve externa a nosotros.

Los pensamientos son vibraciones que, aunque sutiles, tienen una existencia tan real como la de las vibraciones de la luz, del color, de la música o de la electricidad por citar solo algunos ejemplos. Estas vibraciones son una forma de energía y se comportan como tal. El pensamiento puede guiar al prana, logrando que el mismo se comporte de la manera por nosotros deseada, sea esto para influir en los demás en su manera de pensar o para ayudar a recuperar la salud o lo que sea que deseemos efectuar.

Los pensamientos pueden ir de mente a mente, ya que son vibración, resultando en los fenómenos de la telepatía. Esto no es difícil para dos mentes que estén vibrando al mismo nivel y que estén relacionadas por lazos emocionales o de sentimientos.

Los pensamientos se transmiten no solamente a nivel individual mediante fenómenos telepáticos, sino que, un pensamiento fuerte (que tenga suficiente potencia y dirección) puede influir a muchas personas , este es el caso de los oradores potentes que logran convencer a enormes auditorios, ya no solo con la fuerza de sus palabras, sino con la vibración de su pensamiento. Esto es lo que hace que el mismo discurso dicho por una persona no tenga la misma fuerza que dicho por otra.

Nuestras ondas de pensamiento, por llamar de alguna manera a esta vibración, partiendo de quien la crea se extiende en el espacio y en el tiempo, impactando a otras mentes o creando nubes de pensamiento en determinados lugares una vez que deja de viajar. Las nubes de pensamiento se crean con pensamientos afines que tienden a encontrarse y sumarse, mientras que los pensamiento que no son afines ,a la nube predominante de un lugar, suele disolverse o nutrir otras nubes.

Los pensamientos y su impacto en los lugares.

Las ondas de pensamiento se pueden impregnar en un espacio, tanto puede ser cerrado, lo que es mas fácil, como en un lugar abierto como puede ser el claro de un bosque. La naturaleza de los pensamientos que han prevalecido en un lugar, tiñen el lugar con emociones que son fácilmente captadas cuando nos adentramos en él. ¿Quién no ha sentido el cambio al pasar de una calle a un templo? Los templos que han recibido generaciones de pensamientos dirigidos hacia los mismos objetivos, van condensando una atmósfera particular. Esto sucede tanto con pensamientos positivos como negativos. De la atmósfera de solemnidad que reviste a un templo, de recogimiento podemos pasar a la atmósfera muchas veces depresiva de un hospital que puede ser mantenida en el lugar aunque el edificio ya no oficie de hospital. Es por esto que la mayoría de los hospitales abandonados nos provocan esas emociones cuando los visitamos.

Los lugares influenciados por los pensamientos de los que allí viven o vivieron pueden ser de lo más pequeños o abarcar espacios importantes. Las ciudades tienen sus atmósferas derivadas de los pensamientos de sus ciudadanos los países o una sola habitación en una casa, un pasillo o un portal.

La impregnación de estos pensamientos depende de la cantidad de personas que han pasado por un lugar con pensamientos similares, que han ido alimentando a la nube de pensamientos del lugar, del tiempo que han pasado esos pensamientos en esos ámbito, por ello no es lo mismo generalmente la atmósfera de un edificio nuevo que el de uno de siglos. También es importante la carga emocional de los pensamientos que impregnan un lugar, un solo hecho, muy cargado emocionalmente puede marcar un lugar hasta mucho tiempo después de que los pensamientos se emitieron.

¿Cómo se comportan los pensamientos?

La mayoría de los pensamientos que emitimos, algo que pensamos una vez y no repetimos, pensamientos que emitimos con poca fuerza emocional no generan muchas consecuencias.

El pensamiento para que se potencie, debe ser repetitivo, tener una carga emocional importante y ser emitido de manera concentrada por una mente entrenada. Esos son los pensamientos más potentes los que pueden, por el solo hecho de sus existencia cambiar las cosas.

Los pensamientos fuertes buscan pensamientos de carácter similar para combinar fuerzas y hace que las personas con pensamientos similares se encuentren, potenciando la realización de aquello pensado.

El pensamiento potente, concentrado y repetido, trabaja en el astral, configurando aquello que se quiere conseguir, esta es la base del éxito de las afirmaciones y en general del pensamiento positivo.

Pero hay que estar muy en guardia con aquello que pensamos. porque así como se configura lo que deseamos se configura lo que no queremos o tememos, de igual manera.

Así como el amor ( en el sentido más amplio de sentimiento y emoción positiva y creativa) es creador , asimismo así lo es el miedo. Se debe evitar por todos los medios el sentir miedo a algo porque de esa manera nos lo estamos atrayendo, además se debe evitar pensar en cosas negativas o que simplemente no queramos en nuestra vida.

El pensamiento crea para bien y para mal. Es nuestra responsabilidad guiarlo para que atraiga hacia nosotros aquello que buscamos y no lo que no deseamos.

Conceptos esotéricos: el aura humana.

Conceptos esotéricos: el aura humana.

¿Qué es el aura humana?

En los artículos anteriores hemos visto las partes constitutivas del ser humano, ahora vamos a tratar el tema del aura.

No se debe confundir las siete partes constitutivas del ser humano con el aura, esta no es una parte del ser humano sino que es emitida por las siete capas que componen a los seres humanos. Es una radiación una emanación de las mismas. Es decir que cada uno de los siete principios constitutivos del hombre emana una radiación, estas emanaciones se interpretaran sin cambiar cada una su naturaleza debido al hecho de que vibran en diferentes niveles.

Puede que alguno de ustedes se pregunte por que lo de poner el adjetivo de humana al aura, y esto se explica porque, aunque todos los seres vivos tienen aura, el aura humana tiene un tipo especial de aura que esta ligada a los siete principios constitutivos del ser humano.

El aura tiene una forma ovoide la cual incluye a todo el cuerpo humano. 

Es de destacar aquí que el halo de los santos puede haber tenido un comienzo en la visión del aura de estos. Al comienzo del cristianismo el aura se representaba en todo el cuerpo, aun algunas vírgenes mantienen esta representación como la virgen de Guadalupe, aunque en tiempos posteriores se pasó a representar el aura como halo de santidad solo a nivel de la cabeza.

El aura se presenta como una especie de nube oval con colores cambiantes, en los cuales predominan algunos que son los que luego veremos su significación. 

El aura no tiene limites precisos sino que se va debilitando hasta desaparecer, inclusive aunque no se la pueda ver se sabe que sigue estando presente. Los colores predominantes en el aura se relacionan a los pensamientos, emociones y sentimientos prevalentes en cada persona. Los colores se matizan y mezclan continuamente.

Tenemos dos tonalidades que aparecen en el aura, cuando se está en calma prevalecen los colores, por llamarlos de alguna manera, más permanentes, que configuran nuestro ser a largo plazo, cuando se está bajo el dominio de algún pensamiento, de una emoción o sentimiento potente este tiñe al aura de su color propio, por ejemplo bajo un estado de ira el aura se teñirá de rojo aunque no sea el color que tiene siempre el aura.

La primera capa del aura, comenzando desde el cuerpo, es la del cuerpo físico, esta aura está relacionada con la salud corporal. Se extiende desde el cuerpo alcanzando en promedio unos sesenta centímetros, presenta una serie de rayos que cuanto más rectos significan una mejor salud de nuestro cuerpo, estos rayos muestran el prana llegando a nuestro cuerpo, cuando hay algún tipo de problema de salud, derivado de no estar recibiendo prana en la cantidad necesaria, estos rayos parecen doblarse. Generalmente es incolora o de un azul muy pálido aunque generalmente presenta colores mezclados provenientes de las otras auras. Esta primera aura es la más fácilmente visible.

La segunda es el aura astral que parece a una nube de vapor de forma oval , esta aura es más difícil de ver, ya que se mezcla con las demás que tienen más color y parece desaparecer. En los momentos en que el astral deja al cuerpo (ya sea por muerte, durante el sueño o por elección de un ser evolucionado) es cuando es más fácilmente visible al no estar mezclada con las demás. Esta es la nube que parece que vemos cuando se vislumbra un fantasma o espectro que no son más que cascarones del astral.

La siguiente es el aura pránica, esta se ve como una luz brillante o como un área cuajada de chispas. Es rosada cuando está cerca del cuerpo pero pierde color a medida que se aleja. Esta aura es la que nos representa la mayor carga de prana o fuerza vital. Cuando estamos con un vampiro psíquico, esas personas que después de estar con ellas parecen dejarnos sin fuerzas ni ganas de nada, es desde esa aura que extraen nuestra fuerza y ganas de vivir.

El aura de la mente instintiva se compone generalmente de los colores predominantes pero en un tomo más oscuro, cuando se duerme se presenta como un rojo oscuro y mientras estamos en vigilia parece salpicada por los colores más claros y brillantes de los pensamientos, emociones y sentimientos.

Si el principio del intelecto está bien desarrollado, aparece en el aura un color amarillo brillante, generalmente alrededor de la cabeza.

Con respecto al aura del séptimo principio, el del espíritu, no se puede decir gran cosa, porque la realidad del espíritu es bastante inaprensible, lo que se sabe es que presenta un color blanco brillante y puro.

A continuación presentaremos los significados de los colores del aura en general, es decir los colores mezclados de todos los principios, cuando no prevalece ningún pensamiento, emoción o sentimiento particular en el momento.

Los colores del aura y su significado

Negro: representa sentimientos prevalentes negativos tales como el odio, la venganza, u otros sentimientos parecido.

Gris: brillante, representa el egoísmo.

Gris: apagado, miedo o terror.

Gris:oscuro, depresión y melancolía.

Verde: mezclado, celos, si los celos se acompañan de ira con llamaradas rojas.

Verde: opaco, representa la falsedad vulgar.

Verde: luminoso, representa tolerancia, adaptabilidad, tacto, cortesía.

Rojo: oscuro sensualidad y pasión animal.

Rojo: brillante como llama, ira.

Carmesí: amor, si es amor sensual más oscuro, si es amor elevado más claro y brillante. Un amor elevado se ve casi rosado.

Marrón: avaricia deseo por cosas materiales.

Naranja: luminoso, orgullo y ambición.

Amarillo: fuerza intelectual. Cuanto más claro y brillante más relacionado con niveles superiores. El amarillo claro y brillante también se asocia a la iluminación espiritual.

Dorado grandes logros intelectuales, buen razonamiento e inteligencia potente.

Azul oscuro: religiosidad cuanto más hacia el índigo o violeta religiosidad más elevada.

Azul claro: claro y luminoso, espiritualidad , si presenta chispas espiritualidad muy elevada.

Colores ultra violetas : no se perciben a simple vista como los infrarrojos. Representan un desarrollo del psiquismo que se vuelca en el bien común, el altruismo y los fines elevados.

Colores infrarrojos: desarrollo del psiquismo aunque este está siendo utilizado para objetivos egoístas y nocivas.

Conceptos esotéricos: La radiestesia.

¿Qué es la radiestesia?

La radiestesia es una disciplina que busca estudiar el comportamiento energético del hombre, de el medio en que vive y de la relación entre estas dos cosas en un momento determinado. Estas cosas se estudian a través de las radiaciones electromagnéticas las cuales son canalizadas e interpretadas por el radiestesista o rabdomante. Este sujeto con la ayuda generalmente de elementos externos como pueden ser un péndulo o una varilla de zahori que es una rama en forma de Y o de L .

¿Para que sirve la radiestesia?

La actividad por la que es más conocida la radiestesia es la de la ubicación de corrientes de agua subterránea, pero no se agota allí sus usos.

En la búsqueda de corrientes subterráneas de agua, la radiestesia puede determinar el calculo de a que profundidad se encuentra esta veta de agua, el caudal del agua o sea la cantidad de agua que puede tener esa corriente, su presión y la calidad de dicha agua.

Además de la prospección de las aguas subterráneas, esta disciplina se utiliza en la búsqueda de minerales, siendo los más comunes la búsqueda de los metales preciosos, principalmente oro y plata; la búsqueda de petróleo; de gemas preciosas como pueden ser los diamantes, esmeraldas, etc; de combustibles como el carbón; el análisis de la tierra y las posibilidades agrícolas de las mismas, y un largo etcétera.

Asimismo, además de la prospección de determinados elementos en el medio, la radiestesia puede servir para el análisis de las energías en el ser humano y en los lugares que este habita, siendo esto incluido dentro de los análisis que se pueden hacer a nivel de Feng Shui. Estas dos disciplinas, la radiestesia y el Feng Shui, comparten tanto algunos objetivos como algunas de sus prácticas.

Con respecto a la utilidad de la radiestesia para el análisis de las energías en los seres humanos se han desarrollado variados métodos de diagnóstico, como el del Dr Rene Lacroix, el del Dr Leprince o el de Pier Campadello. A nivel de nuestro cuerpo se pueden analizar las energías que circulan por el cuerpo, sus bloqueos, el funcionamiento de sus órganos, así como las afinidades de los objetos que utilizamos como la ropa, los adornos que nos pongamos, los alimentos que consumamos, los remedios y todas aquellas cosas que impacten con sus energías en nuestra energía personal. Estas energías pueden ser tanto positivas o negativas para nuestro organismo. Las negativas pueden ser fuente de desequilibrios que se pueden estudiar y solventar. Es importante aclarar que los desarreglos físicos, corporales del ser humano se manifiestan antes a nivel energético , por lo que si se pueden arreglar los desequilibrios a nivel energético nos estaríamos adelantando a posibles afecciones físicas.

Finalmente, y dentro de unas prácticas que no todos los radiestesistas comparten, están todos aquellos usos relacionados con la búsqueda de personas o de cosas perdidas, de adivinación del futuro o del pasado, y otras prácticas como buscar información oculta.

El estudio de las energías no es algo nuevo. Quizás los que más lo han desarrollado son los chinos que buscaban las energías de los lugares antes de comenzar siquiera a planificar ninguna construcción, dando origen a toda la disciplina del Feng Shui. También los antiguos druidas buscaban y estudiaban las vibraciones y energías de los lugares, los magos del antiguo Egipto y en general en todo el conocimiento ocultista de todas partes del mundo se habla de su estudio. En la Edad Media, este conocimiento se utilizaba de manera habitual aunque la iglesia tanto protestante como católica calificaron de satánica o de contraria a la doctrina a las prácticas radiestésicas.

Método de trabajo del radiestesista.

Para conseguir sus objetivos con la radiestesia, el operador se puede servir, como decíamos, de un péndulo o de unas varillas.

Las varillas pueden ser de dos maneras, por un lado tenemos una pequeña horqueta de madera, generalmente de avellano o sauce, que forma una Y. Para operar con este tipo de varilla el radiestesista sujeta, o más bien apoya, los dos extremos más cortos de la horqueta de manera muy suave en ambas manos, de manera que esta pueda oscilar de manera libre. En el caso de estar haciendo una prospección de agua o minerales por ejemplo la parte más larga de la horquilla indicará, con un movimiento hacia abajo, el lugar en el que se debe cavar para encontrar lo buscado.

El otro tipo de varillas que se suele usar es un par de varillas en forma de L, estas varillas son sujetadas de manera suave mientras se recorre el lugar en donde se está realizando la prospección, manteniéndolas de manera paralela entre si. En el momento que se encuentre lo buscado ambas varillas en forma de L moverán su extremo más largo, para formar entre ellas un cruce, que será lo que indicará el lugar buscado.

Las varillas tanto de uno como de otro tipo son utilizadas generalmente para la prospección en lugares amplios y abiertos.

Por otra parte, cuando se trata de buscar cosas en lugares cerrados, o sobre un plano o mapa, generalmente es utilizado el péndulo. Este se utiliza cogiendo al péndulo sobre el lugar a investigar desde el cordón o cadena de la que pende el péndulo. Se lo deja libre para que se pueda mover, y de esta manera, cuando veamos el movimiento que estamos buscando podemos ubicar lo perseguido. Para profundizar en el tema de los péndulos pueden ver dos artículos en este mismo blog,

“El péndulo. Usos, tipos y correcta utilización” y ¿Qué nos dicen los movimientos del péndulo?

El péndulo también es usado cuando se trabaja sobre cualquier ser vivo, incluido los seres humanos para analizar las energías.

Conceptos esotéricos :Diferencias entre magos y brujos.

Diferencias entre magos y brujos.

Después que me hayan preguntado mucho sobre esto me decidí a escribir un artículo sobre este tema de las diferencias entre estos conceptos.

Primero comenzaré por decir que es lo que generalmente se cree que hace la diferencia entre estos términos, lo que la mayoría de la gente piensa al respecto. 

Muchos piensan, principalmente aquellos que no conocen nada de magia, que los magos son los hombres que practican la magia y que las brujas son las mujeres, esto es erróneo ya que hay magos mujeres y brujos hombres. El sexo o género de quien practica la magia no tiene nada que ver con las diferencias entre los conceptos.

Otras personas creen que los magos son aquellos que utilizan la magia para hacer el bien y las brujas lo utilizan para hacer el mal, nuevamente esto es erróneo, hay magos negros y brujas blancas. Además y como luego veremos,  la definición hacia el bien o el mal en magia no es siempre fácil y depende de los autores lo que consideran como bueno o malo. Me explico hay autores que creen que hacer algo, como por ejemplo curar una enfermedad a alguien, que generalmente es visto como bueno ¿o no? es magia negra si no se le ha pedido permiso a la persona enferma para realizar la curación. 

Por otro lado el hecho de aplicar la etiqueta de bueno o malo, depende de muchas cosas, ya que aunque hay casos muy claros, como que es malo hacer magia para dañar a alguien, hay otros casos más difusos y complejos de analizar y muchas veces lo que es malo para algunos es bueno para otros. La magia es una herramienta y, como tal, como un cuchillo por ejemplo puede ser usada para cocinar o para matar a alguien. Nuevamente la diferencia entre hacer el bien o el mal no es definitoria en la diferencia entre los conceptos que estamos analizando.

Otras personas creen que la diferencia reside en la manera de practicar la magia, asocian a las brujas haciendo las pócimas y los filtros de amor en una cabaña en el bosque y a los magos con las ceremonias mágicas complejas, los ropajes costosos y un gran oropel. 

Mas allá de que forma tome la práctica de la magia, la tecnología de base de la magia es la misma. Aquellos de ustedes que hayan profundizado en el tema verán que la idea no va por aquí. Los ropajes, varitas, escobas para volar y demás elementos, casi cinematográficos, son solamente una manera de vestir y de reforzar el poder intrínseco del oficiante. Una varita mágica, sin el mago adecuado es un palo más o menos decorado. El mago entrenado y maduro puede realizar la magia sin necesidad de ningún elemento externo a él mismo, no necesita ningún implemento, ningún traje ni ninguna conducta que pueda ser reconocida del exterior. Puede estar haciendo magia en una multitud y nadie lo notaria nunca.

Otras personas creen que ser mago o bruja es algo con lo que se nace, otros piensan que hay que estudiarlo y trabajarlo y asocian cada manera de llegar al poder con alguno de estos conceptos, algunos creen que las brujas nacen y otros que mago se nace. Todas estas categorías que estamos analizando, las de las brujas, las de los magos o cualquier otra deben trabajar para conseguir ser oficiantes de magia efectivos. 

Es cierto que algunas personas nacen con una especial predisposición y facilidad para estos temas, como el que es artista o deportista y esto les facilitará el camino, pero si no se preparan y ejercitan como es debido no producirán resultados. 

El camino que debe realizar cualquier persona que desee practicar con éxito la magia es largo y trabajoso, requiere mucha perseverancia y paciencia. Este camino, este aprendizaje tiene como objetivo principal, (aparte de ganar en conocimientos y experiencia claro) , el desarrollo de una voluntad de hierro en el oficiante. El mago o la bruja que no tiene desarrollada la voluntad a un nivel extremadamente alto, para los cánones de la población en general, no tiene poder ni nunca lo tendrá por más que haya nacido con “dones” como se los llama normalmente.

Bueno ya presentamos las principales ideas que se manejan sobre la diferencias erróneas entre magos y brujo o hechiceros.

Vamos ahora a ver cuales son las diferencias reales entre estos conceptos.

Primero la diferencia es de grado. La magia que maneja una bruja y un mago, si los dos son auténticos no debería tener mayores diferencias, aunque si habría una diferencia en el alcance de sus trabajos. El poder de un mago generalmente es mayor que el de un brujo. El brujo puede ser muy efectivo en trabajar en lo micro, en las relaciones interpersonales por ejemplo, pero se encontraría bastante poco efectivo si quisiera hacer que un grupo de personas, una sociedad, un país tomara un determinado rumbo. Normalmente el poder de un mago es mayor ya que su trabajo de preparación, su formación y su entrenamiento es mucho más intenso que el de un brujo y por ello generan un poder más grande.

Segundo la diferencia la hace el manejo de los elementos. A pesar que un buen brujo puede trabajar con los elementos, y de hecho lo hace si es efectivo, su conocimiento de los mismos es bastante más acotado a la esfera de lo práctico. Voy a explicar un poco todo esto, ya que puede ser un poco oscuro, los magos conocen en profundidad el manejo de los elementos, trabajan con su esencia, hacen (por llamarlo de alguna forma) ingeniería con los elementos. Además de los cuatro elementos saben trabajar en profundidad con el akasha lo que les posibilita realizar cambios en la realidad física sin mayores complicaciones. Al tener tal grado de conocimiento de los elementos saben como combinarlos para lograr determinados objetivos, es decir, por poner un símil que me sirvió a mi cuando aprendí esto, el mago puede hacer la receta, mientras que un buen brujo que haya desarrollado su poder personal puede seguir los pasos de una receta y lograr resultados, pero no está capacitado para escribir la receta.

El brujo generalmente se sirve de conjuros ya hechos, de rituales, sigue formulas ya desarrolladas y puede manejar grimorios con éxito. El mago con su conocimiento puede hacer sus propios ritos, no necesita leer en parte alguna que es lo que sirve para lograr tal objetivo, él con su conocimiento profundo los puede desarrollar a medida de sus necesidades.

A manera de resumen podemos decir que el mago es capaz de generar un mayor poder a la vez que sus conocimientos sobre la realidad subyacente a la materia en los diferentes planos, le permite trabajar de manera autónoma.

Una última diferencia es la conducta del mago con respecto a la discreción de su trabajo. Aunque hay algunos brujos que buscan darse a conocer, generalmente para ganarse la vida o lograr fama, el mago autentico nunca se dará a conocer, puedes tener un mago a tu lado y nunca darte cuenta de este hecho. Saben que exponer su conocimiento les resta poder además de atraer una atención que, por su formación ética, no buscarán nunca. Además un mago verdadero, no lo necesita, ya que raramente tiene problemas de dinero.

Conceptos esotéricos ;El Yo esencial.

El Yo esencial.

La investigación para este artículo me ha llevado a muchas calles sin salida. La búsqueda de una aproximación a una definición del Yo esencial, me ha resultado compleja. Por supuesto que no aspiraba a definir el Yo, eso sería demasiado, pero si creo haber podido presentar de manera ordenada las principales corrientes de pensamiento sobre este tema visto desde el ángulo ocultista.

Paso entonces a describir algunas de estas.

El Yo y el cuerpo.

Esta es la primera identificación de lo que es el yo, diría casi a nivel popular, yo soy este cuerpo. Siendo esta la primera identificación es también la más fácilmente descartable. Imagine que su yo es su cuerpo, ¿en que parte de su cuerpo estaría? ¿en una mano? ¿en una pierna? ¿en el cerebro?

La identificación del yo con el cuerpo se desmorona cuando vemos que a una persona que le tienen que amputar las dos piernas, no pierde su concepto de yo, hasta a las personas que tienen terribles accidentes en las que el cuerpo es terriblemente dañado, el concepto de yo sigue sin ningún cambio.

Si identificamos el yo con el cuerpo, a qué cuerpo nos referimos, al de cuando tenemos dos meses, al de los cincuenta años, al de los quince, convengamos que nuestro cuerpo va cambiando completamente a lo largo de nuestra vida y el concepto del yo parece no cambiar con los cambios que afectan al cuerpo, el que está, y en eso hay consenso, en continuo cambio.

Se podría pensar que la parte del cuerpo que es nuestro yo es el cerebro, este órgano también cambia con el correr del tiempo, puede fallar la memoria, podemos olvidar nuestros recuerdos pero seguimos teniendo claro nuestro concepto de yo, inclusive si no recordamos nuestro nombre por alguna enfermedad como puede ser el Alzheimer.

El Yo y los pensamientos

Muchas personas creen que sus pensamientos son el refugio de su yo, que su mente, ahora entendido como un ente separado de su cerebro físico, es el refugio de su Yo. El problema que tiene esta hipótesis es la de que los pensamientos siempre cambiantes no pueden ser nuestro yo, ¿cuál de todos los pensamientos variados, contradictorios a veces y siempre cambiantes son nuestro yo?

Otro problema aún más espinoso enfrenta esta hipótesis ¿cómo somos los creadores y la creación al mismo tiempo? Es decir a los pensamientos los tiene que pensar alguien no, entonces los pensamientos no pueden ser el yo, hay algo más allá del pensamiento.

El Yo y los sentimientos y/o las emociones.

Están quienes piensan que el Yo es el conjunto de nuestras emociones y sentimientos, que estos nos definen. Esto se choca con los dos problemas que tienen los pensamientos, ¿quién siente? ¿quién se emociona? Tiene que haber algo más allá de los sentimientos y emociones. Además nos encontramos que tanto los sentimientos y aún más las emociones, cambian pero no sentimos por ello que pasemos a ser otra persona porque cambian nuestros sentimientos.

Si nos entrenamos lo suficiente en la meditación se puede ver de manera clara esta diferencia entre los pensamientos, sentimientos y emociones. Gracias a una atención clara y entrenada se puede ver el fluir de los pensamientos, de los sentimientos y emociones, y notar claramente que nuestro Yo esencial es el observador y ve pasar todo esto como ajeno sin que lo afecte más que a nosotros ver una película de cine. Recomiendo llegar a esto ya que es muy refrescante descansar de nuestra mente que la mayor parte del tiempo se encuentra desbocada y nos engaña y nos hace padecer con cosas que no pertenecen a nuestro Yo esencial.

El Yo y la personalidad

De manera de salvar el impedimento de la identificación del Yo por de la transitoriedad de pensamientos y sentimientos, surge otra idea que es la de identificar al Yo con la personalidad, vista ésta como más estable que los pensamientos y los sentimientos o las emociones.

Pero aunque la personalidad pueda no ser tan variable como una emoción sigue siendo lo suficientemente variable para no ser el Yo esencial, la personalidad cambia, evoluciona y sigue sus propias pautas. Tampoco esta es el Yo esencial.

Si sabemos separarnos de nuestros pensamientos, verlos ir y venir, cambiar, mutar así como sentir un día de una manera y al siguiente de otra, tendremos a nuestro observador atento. Para ello debemos sentir un desapego de nuestras opiniones, sentimientos, emociones, rasgos de personalidad , verlos como externos, porque lo son, son solo una producción de nuestro yo pero no son el Yo.

Solo si llegamos a ese punto veremos emerger a nuestro Yo esencial que es este silencioso observador.

Nuestro Yo es el que mira, sin sentir ni padecer, sin necesidad de opinar ni de tener la razón. Es el que sabe que aunque le corten una pierna al cuerpo o envejezca, o este gordo o delgado no cambiará. El que no cambiará aunque nos quedemos ciegos, sordos o perdamos la memoria, o cambiemos de opinión, o nuestros sentimientos, que ahora pueden ser tan importantes, en realidad pasan y veamos que no son nosotros mismos.

En el fondo todos sabemos esto, solamente hace falta recordarlo.

Lo siguiente es que el Yo ya no importe y podamos fundirnos con el todo.