Los “juegos” paranormales: La Ouija.

 

Los “juegos” paranormales: La Ouija.

Esta serie va a tratar de aquellos, llamados erróneamente como juegos, en los que entra algún tipo de elemento paranormal. Aunque los llamemos juegos queda claro, que no tienen nada de lúdico y deben ser practicados con todas las precauciones.

Este tipo de juegos implican la realización de determinados rituales, más o menos estandarizados, con el fin de lograr algún efecto paranormal, pueden ser estos, apariciones de entes, lograr información desconocida u oculta, entrar en contacto con fallecidos, conseguir algún tipo de deseo o beneficio o vivir alguna experiencia específica entre otros.

Que quede dicho desde ya, que no realizo esta serie con el fin de promover estos juegos o que estos juegos se lleven a la práctica de cualquier manera y sin la debida preparación. 

Siempre hay que tener mucho cuidado si se va a poner cualquiera de estos juegos en marcha. Queda desaconsejado que los practiquen aquellas personas muy impresionables o que tengan alguna condición física o psíquica en la que una emoción fuerte pueda afectarlos.

Dicho todo lo anterior pasaremos a profundizar en el primer juego de la serie, la tan conocida Ouija y les contaré al final mi experiencia personal con la misma.

La Ouija, algo de historia.

La Ouija, es una palabra compuesta por el "Oui", si en francés y "Ja", si en alemán. Este juego tiene su origen oficial, ya que fue patentado a finales del siglo XIX, aunque posiblemente date de más antiguo, según quien lo patentó, el Sr. Bond afirmó que el mismo pierde sus orígenes en el antiguo Egipto, pero probablemente sea esta una manera de agregarle misterio a su producto.

A fines del siglo XIX es el momento de esplendor de las corrientes espiritistas, y ésta tabla, con letras y números, era una supuesta manera simplificada de comunicarse con los espíritus y el más allá. Rápidamente esta práctica se popularizó y mantiene su vigencia siendo practicada aún hoy.

El problema de la Ouija.

En general este juego es desaconsejado por los riesgos que se corren si no se practica adecuadamente. El principal y más aceptado riesgo es el psicológico. Es decir, la sugestión que podemos sufrir durante la práctica del mismo, así como a posterior, puede hacer que la persona comience a sufrir diferentes problemas siendo el miedo y la perdida de la sensación de la realidad, son las más comunes.

Desde el punto de vista más esotérico, suman a los riesgos psicológicos, los riesgos de invocar sin saberlo entes no deseados, que pueden ser perjudiciales.Estos entes supuestamente no son quienes dicen ser, engañan, mienten y en general su influencia es negativa.

Tanto desde un punto de vista, como desde el otro, se desaconseja su práctica, principalmente por adolescentes o personas especialmente impresionables.

Son conocidas algunas experiencias en las cuales a partir de la práctica de la Ouija, la vida de algunas personas se vio cambiada para mal y en algunos casos se pudieron ver efectos fatídicos. 

Quizás el caso más conocido fue el llamado “Caso Vallecas” que ocurrió en España, en el cual una adolescente practica la Ouija en los baños de su centro educativo. Según otras personas presentes durante el hecho, una especie de humo se coló por las vías respiratorias de la chica, tras lo cual comenzaron, en los días siguientes una serie de fenómenos en su domicilio. Pasados algunos días la chica muere en extrañas circunstancias y suele adjudicársele una razón relacionada con la práctica de la Ouija. Si se quiere profundizar en este hecho puede seguir este link.

Mi experiencia personal con la Ouija.

Mis experiencias son la Ouija fueron, como pasa en la mayoría de los casos, en la adolescencia, en la cual se comienza con este tipo de experimentos de manera bastante desordenada y como manera de socialización con compañeros de estudio y de una manera más lúdica que otra cosa.

En aquellos momentos mis amigos y yo confeccionábamos una especie de Ouija en la cual hacíamos sobre papel las letras, números y demás conceptos de la Ouija y los poníamos en semicírculo sobre una mesa, a la cual nos sentábamos alrededor los participantes de la experiencia. Al centro de este semicírculo colocábamos una pequeña copa o vasito pequeño sobre el cual, los que allí estábamos, poníamos el dedo indice. Le llamábamos el “juego de la copa” y salvo por su confección más artesanal funcionaba de la misma manera que una Ouija.

Normalmente se apagaban las luces y se prendía una vela y generalmente este juego se hacía cuando estaba solo en la casa el grupo que lo iba a realizar.

La realicé en muchas oportunidades con mayor o menor éxito, en algunos casos no “salía” nada ya sea que la copa o cursor no se movía o si se movía no daba un mensaje comprensible. 

Cuando la Ouija, o más bien lo que movía el cursor, sea lo que fuere, daba un mensaje articulado, respondiendo a las preguntas de manera más o menos coherente, en general eran cosas inconsistentes o que no se reflejaban en la realidad, por ejemplo cuando preguntábamos por algo raramente acertaba con la realidad.

Como digo, la mayoría de las oportunidades tuvimos estos resultados pero ahora les voy a contar las ocasiones que destacan por lo que ha sucedido. 

En una de ellas, una de las últimas que lo hice, la copa estalló. Les cuento lo que pasó, estábamos haciendo el juego cuando de golpe una de las personas, creo yo asustada por una de las respuestas obtenidas, rompió el círculo de los participantes y sacó el dedo de la copa. La copa comenzó como a vibrar hasta que estalló en mil pedazos.

En otra de las ocasiones quien “entró” a contestar se identificó como un amigo de mi hermano que había muerto con dieciocho años hacia pocos meses, yo me impresioné ya que allí ninguno de los que estaban realizando el “juego” conmigo sabía de este hecho ni conocía a Fernando , el amigo de mi hermano. Lo peor de todo es que yo había tenido con él una conversación antes de que muriera, sobre estos temas y él, de broma, me dijo que cuando muriera vendría a visitarme, esas cosas tontas que se dicen sin pensar y que después te complican la vida. Luego de que se cumpliera esta visita decidí no participar más en este tipo de cosas y hasta ahora. 

He de decir que mi curiosidad me ha llevado a experimentar con muchas cosas relacionadas con lo paranormal y aun sigo experimentado pero la Ouija es algo que he abandonado por mi salud mental.